Rayco Cruz, conocido autor grancanario, responsable de obras de fantasía épica como La sombra de Pranthas, La maldición de Hilena, La Tierra Negra o Adalid, nos trae este 15 de mayo su nuevo trabajo, una novela corta de terror titulada Germen y que ya se encuentra disponible para su compra por tan solo 1,50€, un auténtico regalo por lo que vamos a obtener a cambio.
Germen arranca con un breve prólogo que nos presenta a un personaje sin más trascendencia que la que desencadenará el suceso clave sobre el que pivotará la trama de la obra, seguido de un «segundo prólogo» —por llamarlo de alguna manera— en la que podremos leer una de las varias cartas que la madre de la protagonista (Vero) le comenta su vida en el convento en el que ha decidido enclaustrarse por voluntad propia, así como los terribles sucesos que están azotando el lugar. Enfadada todavía porque su madre decidiera ponerse los hábitos, dejándola sola en el mundo, las misivas la llenan de preocupación, determinándola a visitarla y ver qué estaba sucediendo en el convento de Santa Melina.
Nos encontramos, como el propio autor nos indica, ante una novela corta de terror. Y se nota. Si dividiéramos el trabajo en dos, podrían ser los sucesos antes de la llegada al convento y lo que sucede en él. En este primer arco, se nos presenta una historia común y sencilla, sin más pretensiones que la de una hija preocupada por los inquietantes mensajes de su madre. Y tiene esto una fantástica virtud, y es la de cómo Rayco Cruz ha sido capaz de dotar de un acertado ritmo de la incertidumbre a aquello que se nos cuenta. La protagonista lo pasa mal en sus propios pensamientos, y eso nos es transmitido con eficacia.
La segunda parte, con sus pies dentro de Santa Melina, abandona la sensación de preocupación para pasar a una asfixiante atmósfera que por momentos nos quitará el aliento, con sus descripciones —especialmente aquellas referidas con el sonido, siempre tan acertadas en su narrativa— y los múltiples elementos de origen orgánico que estoy convencido de que te hará arrugar la cara con desagrado. Y es que todo ello ayuda a conformar un entorno amargo, angustioso.
Narrado en tercera persona y con ese toque que recuerda a algunas obras de Stephen King o incluso a los infectados (y volviendo a hacer hincapié en los sonidos, a los «chasqueadores») del videojuego The Last of Us, esta novelette es la salida ligera al terror que estabas buscando. Y ligera por su extensión (apenas unas 50 páginas), no por la densidad del horror que ella contiene.
Como apunte adicional, la portada corre a cargo de Jose Gabriel Espinosa, volviendo a ser otra colaboración con este ilustrador, quien fuera también el responsable de sus otras novelas y de la nueva edición ilustrada conmemorativa del décimo aniversario de La sombra de Pranthas.
Si eres fan del horror, no podemos por menos que recomendártela.