Sinopsis
Si hay algo que Bast sabe hacer es negociar. Verlo hacer un trato es ver trabajar a un artista…, pero incluso el pincel de un maestro puede errar. Sin embargo, cuando recibe un regalo y lo acepta sin ofrecer nada a cambio, su mundo se tambalea. Pues, aunque sabe regatear, no sabe deberle nada a nadie.
Desde el amanecer a la medianoche, durante el transcurso de un día, seguiremos al fata más encantador de la Crónica del Asesino de Reyes mientras baila con el peligro una y otra vez con asombrosa gracilidad.
El estrecho sendero entre deseos es la historia de Bast. En ella, nuestro protagonista sigue a su propio corazón, aunque sea en contra de su buen juicio. Porque, al fin y al cabo, ¿de que sirve la cautela si lo mantiene a uno alejado de la aventura y del placer?
Historia
Patrick Rothfuss es un maestro de la escritura. O, al menos, lo fue. Ahora, y en especial con esta obra, la percepción que tengo es la de que es un maestro pero del reciclaje.
Hace ya una década, Patrick Rothfuss, que por ese entonces se presumía inmerso en la última parte de Crónica del Asesino de Reyes, publicaba un relato corto titulado El Árbol del Relámpago, con el que iba poniendo los dientes largos a sus lectores. Estuvo bien, fue una buena lectura. Y es precisamente ese relato corto el que tenemos hoy entre manos, pero con… efectos especiales.
Devoré en su día El Nombre del Viento, y El temor de un hombre sabio me duró cuatro días (y eso que estaba inmerso en mis pruebas de acceso a la universidad, allá por 2013). Cuando El Árbol del Relámpago cayó del cielo en 2015 no pude sino sentirme agradecido. Pero los años han pasado, y pasado, y Rothfuss aún tiene dificultades, más de una década después, para sacar adelante Las Puertas de Piedra. Así que, mientras tanto, nos disfraza un relato que ya tenía hecho y que además ya había publicado, le metió diez o veinte mil palabras más que aportan profundidad al relato —pero no novedad— y pidió ayuda para acompañarlo con unas bonitas ilustraciones. Ya está.
Y lo que encontrarás en estas páginas no es sino un refrito (bellamente escrito, eso sí) sobre Bast, un muchacho misterioso, personaje secundario de la historia principal, durante un día normal en el pueblo en el que vive. Y ya está. No esperes mucha magia, no esperes espada y brujería. Espera un relato bien escrito, por supuesto, porque Rothfuss sabe escribir. Pero no hay que olvidar que este refrito llega al mercado por más de 20 eurazos.
Personajes
Bast es nuestro protagonista, y debo admitir que es un personaje bien escrito. Es bueno, es intrigante, es carismático, le sobra misterio y lo sabe. No es chulo, pero sabe de sobra quién es y lo explota hasta sus últimas consecuencias. Profundizaría más en otros personajes, pero no hay mucho más que contar cuando todo —o casi todo— gira en torno a él. Es Bast, el Bast que vive con Kvothe, haciendo de Bast cuando Kvothe no está cerca. Con lo que ello conlleva.
Estilo narrativo
Intachable. Siempre me gustó la pluma de Rothfuss, tan sencilla y elegante, cuidada hasta un nivel enfermizo. Poco hay que decir que no se haya dicho ya. Es la prueba fehaciente de aquello que decía Nicolás Gómez Dávila: «El escritor que no ha torturado a sus palabras tortura al lector».
Edición
La edición que he leído y que es la que reseño es la primera edición publicada por Plaza & Janés en febrero de 2024, de tapa dura (con acabado plano en negro) y sobrecubierta con solapas, impreso en papel ahuesado e ilustrado por Nate Taylor.
Tiene 224 páginas que sirven para engañar, pues el tamaño de la letra es más grande que las de cualquier novela promedio y los márgenes laterales, superiores e inferiores están hinchados a propósito para dilatar de forma artificial el número de páginas.
A nivel de traducción y corrección, el trabajo está inmaculado.
Resumen
El estrecho sendero entre deseos es un relato único de una belleza incontestable que viene a expandir un viejo cuento del autor, pero que no cuenta nada nuevo si en su día tuviste la oportunidad de leer El Árbol del Relámpago, el relato original.
Lo mejor
La prosa sencilla, elegante y una historia sensible y contada con tacto. Las ilustraciones también son una delicia. Es de agradecer que este fragmento de la obra de Rothfuss haya llegado al fin a las estanterías.
Lo peor
El hecho de saber que es un refrito agria la experiencia de su lectura. Es lo mismo, pero más largo, y es más largo para poder cobrar más caro. Tengo la sensación de que en este trabajo no hay un intento por generar algo nuevo, sino por generar beneficios. Los autores no viven del aire, pero reimprimir daba menos trabajo. El PVP tampoco ayuda, y tener en las manos este pequeño trabajo disfrazado antes que la ansiada parte de Las Puertas de Piedra, es un lastre que empaña esta obra. Y no tendría por qué ser así.

Puedes conseguir El estrecho sendero entre deseos, de Patrick Rothfuss, a través de los siguientes enlaces:
Digital: Amazon
NOTA: Reseña hecha y publicada originalmente el 2 de marzo de 2024.