Hablamos con Santiago Tamagnone, realizador audiovisual de origen argentino, director y escritor del largometraje Johan (2021), presentado este mismo año en el Festival de Cine Fantástico de Canarias Isla Calavera, y que es su primer largometraje en el mundo del cine, grabado nada más y nada menos que en distintas localizaciones de Italia, Tenerife y Gran Canaria.
Arrancando un poquito por tus orígenes como director, ¿cómo empieza tu periplo por este mundillo?
Bueno, empieza principalmente por la edición. De chico siempre fui muy cinéfilo, mucha televisión, mucho videoclub. Siempre iba mucho a sacar películas. A partir de ahí surge el interés creativo. Siempre dije que si yo supiera expresarme escribiría excelentes historias, pero como no soy un gran orador en ese sentido, y como no lo soy, y sí soy muy audiovisual, mi mecanismo para contar lo que quiero es esto: el cine. Cuando tenía trece o catorce me entró como el bicho de los AMV (los vídeos de YouTube, los de Dragon Ball y demás), y editar esos vídeos supuso el inicio de todo, es el núcleo que me empuja a querer contar historias.
Más cercano a lo que es el filme de Johan, ¿siempre tuviste clara la idea del guion, la llevabas barajando tiempo, o por el contrario fue más impulsivo? Más, digamos, inmediato.
Todo comenzó con una compañera en la universidad que me pidió ayuda para un trabajo. A mí se me ocurrió la idea de alguien que se despertaba sin saber dónde estaba, perdida. Esa idea se quedó en mí, y en un momento determinado se me ocurrió un final para esa historia. Me gustó mucho esa idea, y supe que iba a acordarme de ella. Así que en cuanto terminé la universidad en 2015, supe que necesitaba un proyecto audiovisual que pudiera mostrar. Hice dos proyectos, el primero fue el de Johan, pero esa idea requería demasiado a nivel de producción y para mí en aquel momento era difícil de abordar. El segundo fue otro guion que realicé paralelamente.
Por problemas de financiación con el Instituto del Cine de Argentina no pude realizar ninguno de los dos proyectos y estuve un tiempo deambulando de un lado a otro, haciendo otros trabajos y demás. A partir de ahí comencé a hacer algunos cortometrajes, para ver si conseguía, digamos, el mínimo necesario de financiación para hacer una película. Así que eso, grabé un corto en 2017 y lo terminamos en 2018. Ese corto quedó seleccionado en algunos festivales y uno de ellos fue en Italia, al que invitaron a algunos directores. Así que dije: «bueno, no tengo otra ventana, así que tengo que ir», y allí hubo un reto para grabar un corto en cinco días en el pueblo de San Potito, y la temática era «la tierra». Allí conocí a Norberto Trujillo, que estaba con su corto Tragedia griega. Él hizo un pequeño cameo en el mío, Terra bruciata, y su corto ganó el premio del jurado, y el mío el del público. Así que quedamos en volver el año siguiente y grabar un nuevo trabajo. Y de ahí sale Johan.
Ahora que ya estamos en materia, ¿qué hay de las localizaciones? Hay algunas que, podríamos decir, aparecen casi de forma fortuita, ¿no?
Algunas de Italia ya las conocía. Las que se rodaron en Canarias las había visto de antemano, un poco impulsado por Norberto. Con el tema de la pandemia las cosas se complicaron y resultó imposible venir a grabar, pero sí que vine a Tenerife para grabar las voces en off de Luis de Madariaga y para comprobar algunos entornos y el equipo del que podíamos disponer. Al final acabamos grabando en Benijo, La Milagrosa y en las Dunas de Maspalomas en Gran Canaria. Y está genial Canarias para grabar. No se me ocurre nada que no pueda grabarse aquí, a nivel de paisajes y demás.
Me imagino que teniendo una idea preconcebida, madurada poco a poco, ¿siempre tuviste claro que sería una historia con esos tintes fantásticos, de terror, de suspense…?
Lo que tiene la película no es que sea fantástica como tal, sino que remite un poco al cine fantástico. El núcleo de la película realmente es el personaje, el pulso que mantiene en todo el metraje, la exploración interna y su evolución. La progresión del individuo lo hace tener un cambio, desde que aparece sin saber hablar hasta aquello en lo que se convierte. Y funciona muy bien gracias al trabajo de Norberto. Es fabuloso.
La idea de que el propio personaje, su evolución, sea el grueso de la trama, pues todo gira en torno a él, ¿es para una felicidad para ti?
Sí, claro. Hice años de actuación, entonces es algo que conozco bien. Me llama más el hecho de los personajes. En Johan no pude explotarlo mucho hasta el final. Hay muchos soliloquios, y la combinación de la magnífica oratoria de Madariaga junto a la formidable actuación de Norberto, que lo transmite todo, hace que todo funcione muy bien.
En cuanto al reparto, ya hemos hablado de Norberto y cómo hemos llegado a él, ¿pero qué hay de Madariaga?
Conocía algunos trabajos de él. Tiene una voz y una presencia que quería para el personaje. Así que simplemente contacté con él y aquí estamos.
Ahora que te vemos coqueteando con el fantástico, el thriller…, ¿te ves haciendo más trabajos para estos géneros?
Bueno, Decotar es más costumbrista. Si bien tiene un guiño al realismo mágico, pero no es de género como tal. Es una comedia dramática. Pero yo crecí con Stephen King, y tengo algunas ideas terroríficas en mente, quizá relacionadas con vampiros, quizá con esos horrores lovecraftianos…
Por último, ¿qué podemos esperar de Johan con respecto a su estreno en el Isla Calavera?
Pueden esperar una fotografía muy buena, una música excelente, interpretaciones brutales, también un ritmo lento (hay que ir preparado para contemplar una historia centrada en el crecimiento de un personaje) y un inesperado giro final. La vuelta de tuerca es una escena que a mí me gustó muchísimo. Ya lo verán.
Desde la Blaster queremos darte muchas gracias por la exclusiva. Y por su puesto seguiremos ahí pendiente del estreno y estaremos ahí para comentar qué nos ha parecido.
Cuento con ello. Si te gustó, pues ya me contarás.
A continuación puedes leer la sinopsis ver y el tráiler de Johan. Y recuerda que podrás verla en exclusiva en el Festival Isla Calavera el sábado 20 a las 12:30 en la Sala Salvaje, a las 23:50 en la Sala 6 y el lunes 22 a las 17:15 en la Sala 17. Tienes toda la información de las sesiones aquí.
SINOPSIS: Johan se despierta perdido, sin recuerdos, incapaz de hablar y atormentado por visiones que no puede comprender. Su padre, comunicándose a través de una vieja radio, le dice que los demonios malvados que viven en su pueblo lo mantienen prisionero.